La Escuela de Arquitectura de la UDEM fue sede del XLI Premio a la Composición Arquitectónica Alberto J. Pani
- Durante el semestre de Otoño 2025, la Escuela de Arquitectura del Centro Roberto Garza Sada de Arte, Arquitectura y Diseño tuvo el honor de fungir como sede del 41 Premio a la Composición Arquitectónica Alberto J. Pani, uno de los certámenes académicos más relevantes en el ámbito de la enseñanza de la arquitectura en México.
Organizado por la Facultad de Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Premio Pani convoca anualmente a estudiantes de último año de las escuelas y facultades de arquitectura que forman parte de la Asociación de Instituciones de Enseñanza de la Arquitectura de la República Mexicana (ASINEA). En la etapa corta, realizada durante una semana en la Facultad de Arquitectura de la UNAM, participaron 38 estudiantes de todo el país. De este grupo, fueron seleccionados cinco finalistas, provenientes de la Universidad Autónoma de Sinaloa, la Universidad Autónoma de Baja California, el Tecnológico de Monterrey Campus Querétaro, la Universidad Iberoamericana Puebla y la Universidad Anáhuac, quienes viajaron a Monterrey para participar en la etapa larga, desarrollada del 13 al 31 de octubre en las instalaciones del Centro Roberto Garza Sada.
El proyecto propuesto para esta edición, titulado “Centro Deportivo Inclusivo de Powerchair Football: infraestructura deportiva para la excelencia adaptada, la inclusión intercorporal para un mundo común y la regeneración del borde del Río La Silla”, planteó un reto profundamente humano y contemporáneo. La propuesta invitó a los participantes a concebir una pieza arquitectónica especializada y socialmente necesaria, destinada a visibilizar, dignificar y potenciar el talento de deportistas en sillas motorizadas, al tiempo que promueve espacios de convivencia entre personas con y sin discapacidad.
Más allá del ejercicio proyectual, el tema permitió reflexionar sobre la inclusión, la accesibilidad y el papel de la arquitectura como herramienta para construir un mundo compartido, donde la interacción humana trasciende las diferencias físicas y fomenta la empatía, la colaboración y la comprensión mutua.
Ser sede de este importante certamen representó para la Universidad de Monterrey y su Escuela de Arquitectura un reconocimiento a su liderazgo académico, su infraestructura de vanguardia y su compromiso con la formación integral de los futuros arquitectos del país. La experiencia reforzó los lazos con la comunidad académica nacional y dejó una profunda huella en los estudiantes, profesores y visitantes que formaron parte de esta edición del Premio Pani.
